jueves, 13 de enero de 2011

Panico en el estadio

Pánico en el estadio
George La Fountaine
Edición  Noviembre 1976
Editorial Lasser Press Mexicana

Sinopsis/comentario Don Penny, jefe de seguridad del Coliseo de los Ángeles, había oído hablar de Arthur Bremen, Sirhan y Lee Harvey Oswald.
Lo que nunca imagino era encontrar a un “loco con un rifle” en su propio estadio el día del juego cumbre del fútbol americano La Súper Bowl.
Con 90.000 aficionados en las tribunas y 75 millones de personas viendo la trasmisión por televisión.
No imagino que tal cosa ocurriría cuando había entre la multitud tres gobernadores, cinco senadores, una docena de diputados al congreso y tres astronautas recién llegados a la Tierra después de una misión espacial.
Cualquiera de ellos podía ser el blanco del asesino.
Cuando solo quedaban unos minutos del encuentro entre los pieles Rojas y los delfines, el camarógrafo que iba a bordo de un dirigible observando el estadio atiborrado de delirantes espectadores, trasmite una fotografía inquietante a uno de sus compañeros que allá abajo maneja la unidad móvil de TV: Detrás del marcador, en lo alto de la torre, en el lugar mas inaccesible del Coliseo, un hombre esta recostado como si tal cosa en la pared, con un rifle de alto poder a su lado.
Esta simple toma fotográfica de un hombre y su arma presenta un dilema mortal: el asesino potencial es un tipo desconocido que tal vez tenga un blanco especifico en la mira, o que tal vez se proponga abrir fuego sobre la multitud, como aquel individuo en la torre de Texas.
Y quizás cunda el pánico cuando los aficionados descubran el peligro que los acecha.
La señal de los dos minutos previa al final del juego, que pronto darán los árbitros, indicaran el momento en que el personal de seguridad del estadio habrá de desalojar a las personas importantes que allí se encuentran.
Al mismo tiempo los tiradores expertos del escuadrón especial SWAT de la policía de los Ángeles-apostados en precaria posición en las torres del alumbrado-abrirán fuego sobre el francotirador.
Para Norbert Baird, adolescente solitario y desconcertado que se encuentra en el techo de la caseta del marcador aislado del mundo, sin un solo centavo en el bolsillo, la señal de dos minutos marcara el inicio de su celebridad internacional, y constituirá la llave de una celda de alta seguridad en el penal de San Quintín… o la muerte.
George La Fountaine ha tenido amplia y directa experiencia en el mundillo de la televisión, lo que ha conferido a esta su primera novela, el sentido de su tremenda autenticidad.
Describiendo el espectacular escenario y el vivido retrato de un personaje frustrado, repudiado y solitario que se trepa a la alta torre del estadio para disparar sobre políticos, policías y ciudadanos, ha logrado escribir una novela de apasionante suspense psicológico, que deja en evidencia la facilidad del personaje gris y anónimo que tras sus fustraciones, odios y desequilibrios psicológicos  puede acceder a un arma.
La Universal Pictures se encargo de plasmarla en la gran pantalla  con Charlton Heston y John Cassavetes y siendo fiel al argumento de Fountaine.
By Tallman

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